Cuidar la alimentación es además muy importante para el paciente, que se desentiende de la realidad y descuidan aspectos tan importantes de la vida como la higiene personal o la dieta.
La familia debe ser consciente que los alimentos proporcionan unas sustancias, llamadas nutrientes, que nuestro organismo necesita para su correcto funcionamiento y que se deben aportar en una proporción determinada.
Debemos tomar en cuenta que las cantidades varían de un individuo a otro y deben ser las adecuadas para mantener un peso dentro de unos márgenes de normalidad.